Tomates con mayor contenido de antioxidantes
Una dieta rica en flavonoides, presentes en frutas y verduras, supone una forma sana y placentera de disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, cáncer y otras enfermedades asociadas al envejecimiento. No obstante, el contenido de estos antioxidantes está muy bien regulado en las plantas. El proyecto Profood investigó la posibilidad de modificar la bioquímica celular para aumentar el valor nutritivo de sus frutos. La primera línea de acción de los investigadores consistió en incrementar los niveles de las moléculas precursoras, componentes de las vías mediante las cuales se obtiene el producto final. Los científicos eligieron dos moléculas, el fosfoenolpiruvato (PEP) y la eritrosa-4-fosfato (E4P), ambas de gran importancia para la producción de flavonoides. Las nuevas plantas de tomate transgénicas presentaban una mayor producción de PEP en los plastos de las hojas. En el caso de la E4P, los científicos se valieron del conocimiento sobre las regiones codificantes en otras formas de vida, como Escherichia coli (E. coli), una especie de musgo y la espinaca. Se encontraron dos enzimas de gran importancia en la ruta molecular de la E4P que mostraron mayor actividad, una en E. coli y la otra en las plantas de tomate transgénicas. Para intentar burlar los mecanismos fisiológicos de control de las plantas, se desarrollaron otros tomates transgénicos. Estas nuevas plantas también producían enzimas relacionadas con la síntesis de flavonoides, pero en localizaciones que normalmente no están implicadas en este proceso, algo que se conoce como expresión ectópica. El tomate se emplea como ingrediente en una gran variedad de platos, desde muy elaborados hasta la cocina rápida. Gracias a esta investigación, algo tan sencillo como comer una pizza podría aumentar de manera sorprendente el contenido de flavonoides en la dieta.