Conversión eficiente de biomasa húmeda en hidrógeno
El hidrógeno, cuando se produce a partir de fuentes renovables de energía como la biomasa, es un carburante sin emisiones y, por consiguiente, se le considera el combustible del futuro. El proceso de conversión también resuelve los a menudo complejos problemas de gestión de residuos asociados a la biomasa. Para hacer realidad estas ventajas, los socios implicados en el proyecto SUPERHYDROGEN han utilizado la gasificación en agua supercrítica (GASC). Para mejorar la eficiencia de este método de gasificación, la Organización Holandesa para la Investigación Científica Aplicada (TNO) ha desarrollado un procedimiento para transformar la biomasa húmeda en un lodo bombeable. Una ventaja de la GASC es que no es necesario secar la biomasa húmeda, que se origina en corrientes de residuos orgánicos, para extraer su contenido energético. Tras los ensayos piloto realizados durante el proyecto SUPERHYDROGEN, TNO determinó que un proceso de tratamiento previo de trituración contribuye a reducir el tamaño de las partículas a niveles óptimos. Otro logro importante ha sido la identificación de las bombas de varios cilindros como las más eficientes. Durante las pruebas se utilizaron lodos biológicos con partículas de hasta 7,5mm y contenido seco de hasta el 20%. Finalmente, TNO examinó la relación entre los costes de producción y la energía obtenida con el nuevo proceso. Puesto que no toda la biomasa húmeda es adecuada para la GASC, los costes asociados a la producción de un lodo bombeable varían desde tan sólo dos euros hasta doce euros por gigajulio térmico (GJth). Los resultados fueron más alentadores respecto de la obtención de la materia prima y su tratamiento previo, con costes inferiores a tres euros por GJth.