Diseño de aerogeneradores potentes pero silenciosos
La energía eólica se está convirtiendo en una popular fuente de generación de electricidad. Tiene ventajas considerables al tratarse de una fuente de energía renovable y llevar aparejadas menos emisiones de CO2. Sin embargo, una de las principales dificultades asociadas con los aerogeneradores es la contaminación acústica y se puede sostener que ésta es la principal razón que existe para la limitación del uso generalizado de la energía eólica en Europa. El ruido generado y la probabilidad de que resulte estresante para las personas que viven o trabajan en las proximidades dependen de una serie de factores. Viene determinado en buena medida por su comparación con el ruido ambiente existente. Esto podría marcar la diferencia entre las turbinas que emiten un ligero zumbido en la distancia y las que producen un ruido vibrante molesto, si no queda tapado por el ruido ambiente. El proyecto SIROCCO investigó cómo adaptar el diseño de la turbina para reducir el ruido creado sin mermar su eficiencia de generación. Los científicos examinaron cómo mejorar el rendimiento acústico de la turbina eólica y mantener al mismo tiempo las estrictas limitaciones geométricas y aerodinámicas aplicadas. Probaron, entre otras cosas, la posibilidad de controlar las propiedades de la capa de barrera de las palas de la turbina eólica. La investigación destacó nuevas vías prometedoras de investigación sobre una nueva generación de turbinas. También reveló que es necesario seguir investigando para entender plenamente los mecanismos del ruido en los aerogeneradores. Se observó que, en este contexto, la colaboración entre la industria y otras instituciones debería ser prioritaria. El proyecto fue el primer paso en la consecución de este objetivo, dado que agrupó a una red de empresas e instituciones que colaboran en toda Europa con el objetivo común de reducir el ruido emitido por los aerogeneradores.
