Gestión sostenible del Golfo de Aqaba
El proyecto SMART fue financiado mediante el programa de Cooperación Internacional en un intento por reforzar la colaboración entre los países bañados por el Mar Mediterráneo. El objetivo era establecer e intercambiar políticas dirigidas a promover un aprovechamiento sostenible de los limitados recursos de las regiones litorales. Uno de los casos prácticos estudiados por SMART trató sobre el Golfo de Aqaba, una importante vía de navegación con la que limitan cuatro países: Arabia Saudí, Egipto, Israel y Jordania. Tanto el transporte marítimo como el turismo tienen un gran peso en esta región, donde se encuentran varios puertos de mucha actividad y destinos vacacionales muy populares. El reto planteado a las organizaciones que participaban en SMART era cómo promover el desarrollo económico sin perjudicar al medio ambiente. Ideólogos de la Universidad de Jordania investigaron las múltiples amenazas que pesan sobre el Golfo de Aqaba. La extensión y la profundidad de este golfo son tales que, probablemente, los contaminantes vertidos en sus aguas permanecen en ellas durante mucho tiempo, de forma que se acumulan sus efectos negativos. Entre las fuentes de contaminación están la industria y la agricultura de la región, el tráfico marítimo, el tratamiento de residuos y la contaminación térmica procedente de una central eléctrica. La Universidad de Jordania y sus socios de SMART han elaborado una serie de recomendaciones partiendo de las conclusiones de su estudio. También se ha preparado un resumen de los resultados más importantes.