Programación de sociedades informáticas globales
Un sistema distribuido es un grupo de ordenadores independientes que se comporta como un único sistema coherente. Conforme va creciendo la complejidad de este sistema, llegamos a la noción de computación global. Un agregado de entidades computacionales que actúan de manera autónoma e interactúan entre sí genera un entorno de computación global. El proyecto SOCS se refiere a estas entidades computacionales como «computados» (computees) para destacar el hecho de que conservan su carácter individual y su heterogeneidad dentro del entorno de computación global. Estos llamados computados adquieren conocimientos de una base de conocimientos común, interactúan siguiendo determinados protocolos especificados previamente y colaboran para conseguir objetivos comunes. Como ocurre en gran medida en una sociedad, las entidades computacionales son al mismo tiempo muy diferentes unas de otras. La posible ausencia de un control global central sustituido por la presencia de un control descentralizado de actividades realza aún más el parecido. El proyecto SOCS ha desarrollado modelos lógicos de razonamiento en un entorno cambiante. Éstos hacen hipótesis plausibles cuando la información es incompleta y se comunican para tomar decisiones. A fin de experimentar con los modelos lógicos de regulación y probar la funcionalidad de sus propiedades, se ha desarrollado una plataforma innovadora. Las sociedades programadoras de computados, la plataforma prototipo PROSOCS, permiten la implementación y el despliegue de estas sociedades de computados. Gracias a la plataforma, las aplicaciones son ahora más transparentes y, por tanto, de más fácil manejo para el usuario. Asimismo, la plataforma prohíbe interacciones no deseadas entre entidades de computación. Las normas de interacción, una vez decididas, pueden integrarse en la plataforma. La plataforma desarrollada se ha probado con éxito en diversas aplicaciones globales de computación como el comercio electrónico y subastas.