Mejores protocolos para la criopreservación
Hay en marcha una labor dirigida a la criopreservación rutinaria de germoplasma de plantas europeas como medio de conservación y en dicha labor es necesario abordar una serie de obstáculos. El proyecto CRYMCEPT, financiado por la CE, se centró en eliminar dichos obstáculos con el fin de allanar el camino para la aplicación de la criopreservación a gran escala para la conservación de plantas. Criopreservar germoplasma de plantas europeas podría ser, en efecto, una de las pocas formas de conservar las especies en peligro para la posteridad. Los socios del proyecto se propusieron definir el conjunto óptimo de parámetros relativos al éxito de la criopreservación, es decir, causar un daño mínimo a los tejidos. En la Universidad de Abertay, en Dundee (Escocia), se estudió el grado de estrés oxidativo y se emplearon los conocimientos obtenidos para desarrollar protocolos mejores. El seguimiento del estrés oxidativo permite a los investigadores definir los pasos o componentes específicos que provocan lesiones celulares y, así, efectuar las modificaciones necesarias. La información resultante puede resultar extremadamente útil para los investigadores y las empresas de biotecnología que trabajan en la criopreservación, así como para los interesados en los estudios de la conservación de las plantas. Es probable que la mejora de los protocolos de criopreservación tenga repercusiones, en general, en los intentos de almacenar tejidos, incluidos los tejidos animales y el material vegetal.