El futuro de la Web es semántico
Un aspecto importante del despliegue de la nueva generación de la World Wide Web (WWW), la Web Semántica, es su infraestructura básica. Para disponer de una amplia gama de servicios inteligentes como los agentes de información, agentes de búsqueda y filtros de información, las ontologías deben actuar como vocabularios compartidos. Al definir de manera explícita y formal la semántica de los objetos y sus interrelaciones, desempeñarán un papel crucial al permitir el acceso basado en contenidos, la interoperabilidad y la comunicación por toda la Web. El proyecto europeo WONDERWEB se propuso como objetivo abordar la pregunta que se plantea conforme va evolucionando la comunidad de usuarios: «¿qué tipo de ontologías serán necesarias?» Asimismo, se hace crucial la necesidad de establecer acuerdos precisos sobre el significado de términos, conforme las comunidades multiculturales y plurilingües empiezan a intercambiar datos y servicios. Para ello, el trabajo de investigación llevado a cabo por los socios del proyecto WONDERWEB se centró en el desarrollo de una biblioteca de ontologías fundacionales. Se desarrolló un marco de metodologías de ingeniería a fin de que las ontologías se relacionaran entre sí de manera que tuvieran sentido y para que las alternativas que subyacen a las diferentes opciones ontológicas fueran lo más explícitas posibles. Los investigadores del Istituto di Scienze e Tecnologie della Cognizione en Italia intentaron, primero, aclarar las actitudes generales del análisis ontológico. En otras palabras, intentaron distinguir las motivaciones y las limitaciones que mueven nuestra conceptualización del mundo antes de incluir distinciones cruciales en módulos de referencia para la interpretación de ontologías nuevas. Por otro lado, la gestión y organización de los datos y documentos ya disponibles en la Web requiere ontologías de un dominio específico. El siguiente paso de esta línea de investigación fue, por tanto, dar con métodos para volver a diseñar, alinear y fusionar Sistemas de Organización del Conocimiento (SOC). Al contener metadatos en vocabularios, taxonomías y directorios, los SOC sirven de soporte para el etiquetado de documentos y la recuperación de información, pero están caracterizados por la informalidad y la heterogeneidad. En el contexto de un estudio de casos concretos, se demostraron principios que pueden adoptarse a la hora de rediseñar mediante ingeniería SOC semiestructurados para convertirlos en ontologías formales con fines de integración de la información en un dominio específico. Esta biblioteca de sistemas ontológicos contribuiría a hacer que los ordenadores se ajustaran a acuerdos ontológicos comunes, lo que parece más eficaz que imponer la interoperabilidad.