Novedades acerca del proyecto ENABLEH2: Reavivar el interés por las tecnologías impulsadas por hidrógeno para un transporte aéreo sin emisiones
Puede que el equipo del proyecto ENABLEH2 haya sufrido algunos retrasos relacionados con la COVID-19 antes de su finalización en enero de 2023, pero desde entonces no ha perdido el tiempo en utilizar sus logros tecnológicos para seguir desarrollando el transporte aéreo basado en hidrógeno. Uno de estos desarrollos es la investigación realizada por el socio sueco del proyecto, la Universidad Tecnológica Chalmers, que demuestra que en torno al 97 % de los vuelos nórdicos de corto y medio alcance podrían estar propulsados por hidrógeno en 2045. La tecnología que lo hace posible es un nuevo tipo de intercambiador de calor compacto, un componente clave de la aviación basada en hidrógeno desarrollado con el apoyo de ENABLEH2. El intercambiador de calor aprovecha la baja temperatura de almacenamiento del hidrógeno para enfriar las piezas del motor y, a continuación, utiliza el calor residual de los gases de escape para precalentar el combustible varios cientos de grados antes de inyectarlo en la cámara de combustión. En cuanto al impacto en los motores que utilizan hidrógeno líquido, los investigadores de la Universidad Chalmers han demostrado que la combinación de intercambiador de calor, combustión micromezcla y recuperación del calor de escape debería mejorar el consumo de combustible en un 8 % y reducir las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) al despegue en un 38 %.
Avances que van más allá
La experiencia adquirida en la combustión de micromezclas de hidrógeno con bajas emisiones de NOx y en el diseño de tanques y sistemas de combustible de hidrógeno líquido en el marco de ENABLEH2 permitió al coordinador británico del proyecto, la Universidad de Cranfield, realizar importantes aportaciones a FlyZero, un proyecto cuyo objetivo es lograr una aviación comercial con cero emisiones de carbono para 2030. Además, los sistemas de gestión térmica utilizados en estudios de motores alimentados con hidrógeno líquido en otro proyecto financiado con fondos europeos, MINIMAL, también se benefician de las combinaciones sinérgicas de las tecnologías identificadas en ENABLEH2. En la Universidad Chalmers también ha creado un nuevo centro de competencia para la integración del hidrógeno en el transporte, centrado en acelerar el desarrollo de tecnologías nuevas que permitan el uso del hidrógeno en aplicaciones de aviación, marítimas y de carretera. Como resultado de los experimentos realizados en ENABLEH2 sobre la combustión de hidrógeno, la Universidad de Cranfield ha recibido más financiación para los proyectos relacionados con el hidrógeno, entre ellos el desarrollo de una cámara de combustión de micromezcla en un proyecto dirigido por Rolls Royce. Gracias a la financiación europea, en ENABLEH2 se ha logrado reavivar el interés por la aviación impulsada por hidrógeno. «Los 3,9 millones de euros permitieron a sus socios desarrollar capacidades que ya han hecho aportaciones importantes a las tecnologías emergentes para la aviación de hidrógeno con cero emisiones netas», afirma Andrew Rolt, investigador principal de la Universidad de Cranfield.
Palabras clave
ENABLEH2, hidrógeno, aviación, vuelo, intercambiador de calor, combustión, transporte aéreo, hidrógeno líquido