Un nuevo fármaco ofrece esperanzas en la lucha contra el cáncer de mama
El cáncer de mama triple negativo (CMTN), que representa el 15-20 % de los tumores de mama diagnosticados, se caracteriza por su gran malignidad, su alto riesgo de recidiva y su mal pronóstico. «La principal razón de su letalidad es la rápida diseminación de las células cancerosas a través de la sangre o el sistema linfático, lo que propaga el cáncer en forma de tumores secundarios (metástasis) a otras partes del organismo», explica la coordinadora del proyecto CanceRusolution, Andreia Valente, de Something in Hands, una empresa derivada de la Universidad de Lisboa, en Portugal. «La tasa de supervivencia a 5 años es de tan solo un 26 %».
Abordar la capacidad metastatizante del CMTN
Uno de los principales retos del tratamiento del CMTN es su células carecen de receptores de estrógeno, lo que significa que hay menos opciones terapéuticas dirigidas. Una solución alternativa podría consistir en combatir su capacidad metastatizante y, de este modo, su invasividad. Esto es lo que se propuso hacer el equipo del proyecto CanceRusolution, financiado con fondos europeos. «Desarrollamos un nuevo metalofármaco (basado en el rutenio) para tratar el CMTN y sus metástasis», señala Valente. «El objetivo específico de este proyecto era demostrar la prueba de concepto mediante estudios “in vivo” en ratones». Resultados previos pusieron de manifiesto la capacidad antimetastatizante del nuevo fármaco, encapsulado en nanopartículas. Esta técnica permite administrar los principios activos con mayor eficacia, al aumentar su permeabilidad y favorecer que se acumulen preferentemente en el interior de los tumores. El proyecto financiado con fondos europeos permitió al equipo dar un paso más en el desarrollo de fármacos mediante la realización de estudios en ratones. «Después pudimos efectuar estudios farmacocinéticos con el fin de comprender el metabolismo de nuestro fármaco», explica Valente. «Esto se logró controlando la concentración del fármaco en el plasma, el tumor y diversos órganos, concretamente el bazo, los riñones, el corazón, los ganglios linfáticos, los pulmones, el cerebro y el hígado». El equipo del proyecto también amplió la síntesis del fármaco, un paso necesario para avanzar hacia su producción comercial. Esta actividad ayudó asimismo al equipo a comprender cómo superar posibles contaminaciones/productos secundarios, indetectables a escala del miligramo, pero más marcadas a escala del gramo.
Resultados positivos del estudio farmacocinético
Los estudios farmacológicos «in vivo» demostraron satisfactoriamente la prueba de concepto. Solo fueron necesarios 6 tratamientos para reducir las metástasis en cerca del 30 % de los ratones afectados. «Los estudios farmacocinéticos arrojaron resultado positivos», añade Valente. «Las concentraciones del fármaco se mantuvieron durante más tiempo en el tumor, mientras que disminuían en sangre y orina. El fármaco también se detectó en otros órganos estudiados sin causar toxicidad, lo que demuestra su capacidad para combatir las metástasis que se producen en ellos». Además, el equipo del proyecto logró multiplicar por cinco la escala de producción y sintetizar el fármaco con un grado de pureza muy elevado.
Una revolución en el campo de la quimioterapia antineoplásica
Valente señala que, aunque los resultados son positivos en general, aún queda mucho trabajo por hacer. «Queremos continuar con los estudios de seguridad, que son esenciales antes de iniciar nuevos ensayos clínicos», destaca la coordinadora. No obstante, los resultados demuestran que hay esperanzas de encontrar un tratamiento eficaz para el CMTN. «Creemos que nuestro fármaco es eficaz», afirma Valente. «Si encontramos los socios adecuados para colaborar con nosotros, consideramos que podremos ofrecer un tratamiento revolucionario para el campo de la quimioterapia antineoplásica».
Palabras clave
CanceRusolution, cáncer de mama, CMTN, metástasis, estrógeno, metalofármaco, tumores
