Trabajar por una bioeconomía azul más fuerte en Europa
Desde su presentación en 2018, en el proyecto BlueBio, financiado con fondos europeos, se ha realizado un esfuerzo por identificar nuevas formas para comercializar bioproductos y mejorar las existentes. El equipo del proyecto creará un programa coordinado de financiación de investigación y desarrollo para reforzar la posición de Europa en la bioeconomía azul. Para concretarlo, en BlueBio han desarrollado una Agenda Estratégica de Investigación e Innovación (SRIA, por sus siglas en inglés) que ayuda a las partes interesadas a avanzar hacia la creación de valor a partir de la bioeconomía azul. La bioeconomía azul se basa en el uso sostenible de recursos acuáticos vivos y renovables como algas, esponjas, peces, mejillones y microorganismos del mar, lagos, arroyos e instalaciones de acuicultura. Estos recursos dan lugar a una gran variedad de productos y servicios. La innovación en la bioeconomía azul consiste en alimentos, piensos, nutracéuticos y aditivos nuevos, productos farmacéuticos y cosméticos, productos químicos y materiales ecológicos, así como enzimas para el procesamiento industrial ecológico. La SRIA de BlueBio es el resultado de un proceso de prospectiva y generación de supuestos con las partes interesadas de la industria, el gobierno, la sociedad y la ciencia. En una noticia publicada en el sitio web del proyecto se afirma: «Mediante una serie de talleres con las partes interesadas, los participantes imaginaron el año 2050 y trazaron los escenarios sobre posibles mundos futuros, cómo podría ser la bioeconomía azul en 2050, cómo alcanzar o evitar esas situaciones futuras, trazando los pasos hacia esos posibles futuros para crear agendas de investigación para cada uno de ellos».
Áreas en las que se necesita innovación
La SRIA se centra en seis áreas dentro de la investigación e innovación de la bioeconomía azul. La primera, el equilibrio azul, se refiere a la necesidad de comprender la biosfera azul e identificar los puntos de inflexión de los servicios ecosistémicos para intensificar la utilización de la biomasa. «Debemos utilizar las nuevas tecnologías para comprender los efectos de la manipulación de los ecosistemas y las interacciones tierra-mar. Las innovaciones basadas en la naturaleza deben formar parte del uso sostenible», se afirma en el informe. En la segunda área tratada, el equilibrio social, se considera crucial la interacción entre la bioeconomía azul y la sociedad. «La confianza, la comprensión y la legitimidad social deben estar presentes para desarrollar normativas, planes de gestión y mercados». La tercera es el cambio climático, que previsiblemente influirá en los ecosistemas acuáticos. «Es necesario comprender y modelizar los efectos directos e indirectos, tanto para gestionar el sistema socioecológico como para adaptar y mitigar las repercusiones», se explica en el informe. La SRIA también enfatiza la existencia de múltiples posibilidades para la bioeconomía azul en la cuarta área con necesidades de investigación e innovación, a saber, la innovación tecnológica: «Los sistemas inteligentes de supervisión, la ingeniería genética, la búsqueda de alternativas a los antimicrobianos, los sistemas de acuicultura de recirculación, la captura de carbono, la mejora de los recursos de piensos y alimentos y la garantía de la salud y el bienestar de los animales son piezas importantes del rompecabezas». En cuanto al desarrollo de la cadena de valor (quinta área), en el informe se señala: «El ciclo de producción debe cerrarse para que la bioeconomía azul esté realmente preparada para el futuro. Debemos optimizar los flujos secundarios, minimizar los residuos, comprender todo el ecosistema de la cadena de valor, tanto azul como verde, y ejecutar la trazabilidad de toda la cadena». Por último, en la ciencia para la sociedad, no puede haber repercusión de la investigación y la innovación sin asimilación en la sociedad. «Debemos entender cómo fomentar los vínculos entre la ciencia y la toma de decisiones, mejorando la educación, capacitando a las personas, desarrollando capacidades y promoviendo la alfabetización oceánica». La financiación de la investigación y el desarrollo requiere conocer las investigaciones anteriores y en curso y las lagunas existentes. Por ello, el equipo de BlueBio (ERA-NET Cofund on Blue Bioeconomy - Unlocking the potential of aquatic bioresources) ha creado una base de datos de 3 254 proyectos de investigación sobre bioeconomía azul financiados a nivel nacional e internacional y activos entre 2003 y 2019. Para más información, consulte: Sitio web del proyecto BlueBio
Palabras clave
BlueBio, bioeconomía, bioeconomía azul, investigación e innovación, ecosistema, sociedad, cambio climático, innovación tecnológica, cadena de valor
