Una nueva vida para los neumáticos al final de su vida útil
Los neumáticos de los coches son un importante problema ambiental y el negro de carbón —un material utilizado en su producción— es uno de los culpables. El negro de carbón es un carbón en polvo fino, producido a partir de la combustión incompleta de productos pesados del petróleo, que se utiliza principalmente para reforzar los neumáticos a fin de que resistan mejor los rayos ultravioleta y de prolongar su vida útil. Cada año se producen unos catorce millones de toneladas de negro de carbón en todo el mundo, lo que genera hasta cuarenta millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono. De los aproximadamente mil millones de neumáticos que llegan al final de su vida útil cada año, solo se recicla una parte. A fin de impulsar la industria de los neumáticos hacia la era de la economía circular, el equipo del proyecto financiado con fondos europeos BlackCycle ha aportado su granito de arena y ya ha producido el primer negro de carbón sostenible del mundo.
Un gran paso hacia la sostenibilidad
Durante un taller celebrado en noviembre de 2021, los colaboradores de BlackCycle anunciaron un importante avance tecnológico que supuso la producción de negro de carbón sostenible para neumáticos en un reactor convencional de negro de carbón utilizando aceites derivados de la pirólisis de neumáticos al final de su vida útil. «Esta nueva forma de producir un material sostenible a partir de neumáticos al final de su vida útil constituye un proceso verdaderamente circular», tal como se afirma en una nota de prensa publicada en el sitio web de AXELERA (Francia), empresa que colabora en el proyecto BlackCycle. Casi todos los compuestos de caucho utilizan negro de carbón como relleno. Las pruebas demostraron que sustituir un negro de carbón producido con combustibles fósiles por un negro de carbón fabricado a partir del aceite derivado de la pirólisis de los neumáticos al final de su vida útil no cambiaría las propiedades del compuesto de caucho. Por lo tanto, se mantendrán altos niveles de durabilidad, conductividad, resistencia a la rodadura y otras características, incluso para los usos de caucho más exigentes. «Así pues, podemos suponer que el negro de carbón sostenible es una solución fácil de aplicar sin necesidad de ajustar las fórmulas de los compuestos de caucho o los parámetros del proceso, por ejemplo, en la mezcla, el moldeo o el curado —según se informa en la nota de prensa—. Dado que el contenido de negro de carbón de los materiales elastoméricos es relativamente alto, con un porcentaje ponderado del 30 % de media, la tecnología que aplica el aceite de pirólisis como materia prima para la producción de negro de carbón representa un gran avance hacia una industria del caucho más sostenible». El proyecto BlackCycle (FOR THE CIRCULAR ECONOMY OF TYRE DOMAIN: RECYCLING END OF LIFE TYRES INTO SECONDARY RAW MATERIALS FOR TYRES AND OTHER PRODUCT APPLICATIONS) se puso en marcha en mayo de 2020 y su objetivo es demostrar la aplicación de los principios de la economía circular a los neumáticos al final de su vida útil en Europa. El equipo del proyecto creará, desarrollará y optimizará una cadena de valor completa, desde la materia prima obtenida de los neumáticos al final de su vida útil hasta las materias primas secundarias (MPS), lo que eliminará el aprovechamiento excesivo de recursos en toda la cadena y se centrará en el impacto ambiental. Gracias al proyecto, se espera que uno de cada dos neumáticos al final de su vida útil se incorpore a esta nueva cadena de valor circular. Estas MPS se utilizarán para crear nuevas gamas de neumáticos para turismos y camiones que se venderán en todo el mundo. Para más información, consulte: Sitio web del proyecto BlackCycle
Palabras clave
BlackCycle, neumático, negro de carbón, economía circular, fin de la vida útil, caucho