Qué hacer y qué no en la formulación de políticas basada en datos
La lenta evolución de los marcos jurídicos y la importante pasividad han obstaculizado durante mucho tiempo los planteamientos innovadores de los procesos administrativos. En este contexto, los datos masivos podrían parecer un desafío infranqueable. Entonces, ¿cómo lo superamos? El proyecto Big Policy Canvas (Big Policy Canvas – Needs, Trends and ICT Tools for Advanced Data-Driven Public Sector) puede tener las claves para que las decisiones basadas en datos superen los retos de la sociedad. A lo largo de dos años, el proyecto se esforzó por proporcionar al sector público toda la información necesaria para convertirse en una estructura de formulación de políticas basadas en pruebas eficaz, eficiente, precisa y coherente. «Como acción de coordinación y apoyo, proponemos las diferentes direcciones de investigación e innovación que deben seguirse», indica Ricard Munné, coordinador de Big Policy Canvas y director de Proyectos de Investigación e Innovación en Atos.
Guiar la investigación futura y la toma de decisiones
A lo largo de dos años, el proyecto desarrolló un conjunto de herramientas a tal efecto. La primera es el marco de evaluación de necesidades y tendencias («Needs and trends assessment framework»). Se basa en investigaciones documentales, entrevistas con expertos y un análisis cuantitativo de bases de datos científicas en línea y de Twitter. El marco ofrece una metodología para crear un mapa de las necesidades de las administraciones públicas y las tendencias que pueden repercutir en su proceso de formulación de políticas en los ámbitos de aplicación (agricultura, planificación urbana, salud, etc.). También evalúa estas necesidades y tendencias basándose en la criticidad e intensidad. Si siguen este marco, las administraciones públicas pueden dar prioridad a los ámbitos de aplicación de mayor interés, importancia, urgencia y capacidad. La segunda herramienta es la base de conocimientos «Knowledge Base», un repositorio en línea que incluye todo el conocimiento producido por Big Policy Canvas. El contenido se estructura en torno a las necesidades, las tendencias y los activos, con enlaces cruzados entre los elementos que influyen o están interconectados entre sí. Digamos, por ejemplo, que una administración se enfrenta a la necesidad de proteger el medio ambiente. Con la base de conocimientos, podrá descargar datos abiertos valiosos, obtener recomendaciones y averiguar qué herramientas deben utilizarse (incentivos, internet de las cosas, redes sociales, etc.). Las otras dos herramientas son la Hoja de ruta para las futuras líneas de investigación en la formulación de políticas basada en datos («Roadmap for Future Research Directions in Data-Driven Policy Making») y las Líneas y recomendaciones de investigación («Research Directions and Recommendations»). Mientras que en la primera se enumeran las líneas de investigación e innovación destacadas por el equipo del proyecto, el objetivo de la segunda es acelerar la adopción de la hoja de ruta. Munné lo explica en los términos siguientes: «Nuestros esfuerzos condujeron a la identificación de seis “grupos desafiantes”: la privacidad, la transparencia y confianza; la creación de un marco de gobernanza pública para las estructuras basadas en datos; la adquisición, limpieza y representatividad de los datos; el almacenamiento, la agrupación y la integración de los datos; la modelización y el análisis con datos masivos; y la visualización de datos. Los acompañamos de un conjunto de líneas y recomendaciones de investigación para todas las partes interesadas». El proyecto ya ha finalizado, pero Munné confía en que la Hoja de ruta y las Líneas y recomendaciones de investigación sigan permitiendo la formulación de políticas basada en datos en los próximos años. La asociación Big Data Value tiene la intención de incorporar los principales resultados de Big Policy Canvas en su Libro Blanco sobre la hoja de ruta, mientras que el proyecto de Horizonte 2020 Co-VAL mantendrá y fortalecerá la comunidad que se ha creado. Otros proyectos, como Big Data Stack y PolicyCLOUD, también utilizan los resultados y aportaciones de Big Policy Canvas para desarrollar sus propuestas. «Estamos decididos a que nuestra comunidad siga creciendo», concluye Munné.
Palabras clave
Big Policy Canvas, administración pública, datos masivos, base de conocimientos