Una tecnología de código abierto libera el potencial de la energía undimotriz
En la Hoja de Ruta de la Energía de la Unión Europea se afirma que la energía renovable debería representar al menos el 64 %, y hasta el 97 %, del consumo eléctrico en 2050. La energía undimotriz y mareomotriz sigue siendo una fuente de energía sin aprovechar, pero podrían ser la clave para que Europa pueda cumplir este compromiso. Sin embargo, para que esto suceda, es necesario que el sector de la energía undimotriz logre unas economías de escala y tenga acceso a tecnología fiable y a una cadena de suministro dedicada. En concreto, uno de los retos es que no hay ninguna energía de toma de fuerza (PTO, por sus siglas en inglés) imperante. Esta es la tecnología que se integra en dispositivos marinos, como las boyas, y que se encarga de convertir la energía cinética de las olas o las mareas en energía utilizable. «La energía undimotriz aún está dando sus primeros pasos, lo que significa que hay muchas tecnologías distintas», explica Francisco García, coordinador del proyecto SEA-TITAN (Surging Energy Absorption Through Increasing Thrust And efficieNcy) y director general de Wedge Global (España). «Cuando se empezó a aprovechar la energía eólica en los años ochenta del siglo pasado, había muchos dispositivos e inventos diferentes antes de que estas tecnologías acabasen convergiendo». García considera que, en esencia, el sector de la energía undimotriz sigue el mismo camino. Cree que la convergencia tecnológica es fundamental para lograr una reducción de costes, por eso SEA-TITAN se centra en normalizar la tecnología de PTO y conseguir que sea asequible para todo el mundo.
Una tecnología fiable y asequible
El proyecto SEA-TITAN se basa en un trabajo desarrollado previamente por Wedge Global y que abordó un problema habitual: el hecho de que las PTO instaladas en dispositivos marinos tendían a averiarse. Esto se debía, en parte, al entorno adverso en el que se suponía que tenían que funcionar. García y su equipo construyeron una PTO de cobre y hierro que demostró funcionar bien en el entorno marino, además de proporcionar una conversión energética eficiente. «Desde que empezamos a trabajar en SEA-TITAN, nuestro objetivo era aprovechar estos conocimientos y desarrollar la siguiente generación de PTO de forma que pudiese aplicarse en diferentes dispositivos de aprovechamiento de la energía undimotriz o mareomotriz», comenta García. «A fin de favorecer la innovación, la tecnología será de código abierto». Los diseños de la siguiente generación de PTO han finalizado y se está construyendo el prototipo en cooperación con Siemens-Gamesa. Uno de los elementos clave era aumentar la recolección de energía a fin de lograr una eficiencia alta con unos costes de explotación bajos. «Esperamos empezar a ver algunos resultados reales a finales de este año, entonces podremos pasar a las fases de ensayo y validación», añade García. «Además, estamos desarrollando dispositivos electrónicos y componentes de potencia asociados para garantizar que la PTO funciona sin problemas. Lo mejor de la validación es que siempre surgen nuevas ideas o se encuentran formas de hacer que las cosas funcionen mejor».
Una innovación de código abierto
Uno de los aspectos más interesantes de SEA-TITAN ha sido el hecho de que, aunque se trataba de un proyecto impulsado por el sector privado, se ha hecho mucho hincapié en el acceso libre a la innovación. Se ha creado un comité externo de explotación industrial con expertos en producción de electricidad, fabricación de máquinas eléctricas en el campo de las energías renovables, asociaciones de energía y otras partes interesadas en la energía marina relevantes. «Cualquiera que tenga interés en esta tecnología puede unirse al comité para acceder a los resultados y tener la oportunidad de formar parte de un nuevo ecosistema en el ámbito de la energía undimotriz», señala García. «De nuevo, esto favorecerá la convergencia tecnológica en el sector, lo que contribuirá a acelerar la innovación y su ulterior comercialización». Está previsto que SEA-TITAN finalice en marzo de 2021, momento en el que García espera mucha más colaboración de toda la industria, así como pasos positivos de cara a la convergencia tecnológica.
Palabras clave
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