Reunión de cabezas pensantes en Atenas durante el Human Brain Project
Lo sepamos o no, consciente o inconscientemente, el encéfalo trabaja para controlar de manera precisa todas las funciones corporales, desde las básicas, como la respiración, hasta las funciones motrices más complejas imaginables durante las actividades deportivas. Aproximadamente ochenta y seis mil millones de neuronas, cada una con un promedio de siete mil conexiones con otras neuronas (sinapsis), mantienen la vida y nuestra existencia tal como la conocemos. Dando la bienvenida a los asistentes al evento desde «la cuna de la democracia» y augurando unos días con un tiempo excepcional, Yannis Ioannidis, profesor de informática y telecomunicaciones en la Universidad de Atenas y director general del Centro de Investigación Atenea, inauguró un recinto repleto de investigaciones punteras sobre el encéfalo. Desde la perspectiva general del Human Brain Project (HBP) y EBRAINS hasta la lucha contra las enfermedades neurodegenerativas y la epilepsia, en el primer día, se presentaron las iniciativas mundiales dedicadas al estudio del encéfalo, el desarrollo del lenguaje y las diferencias entre el encéfalo de los músicos y el de los meros mortales que solo escuchan y disfrutan.
El Human Brain Project
El HBP es uno de los mayores proyectos científicos dedicados al estudio del encéfalo a nivel mundial y, como proyecto emblemático del programa Tecnologías Futuras y Emergentes (FET), es uno de los proyectos más grandes financiados por la Unión Europea. Katrin Amunts, profesora del Instituto de Investigación del Encéfalo Cecile y Oscar Vogt de la Universidad Heinrich Heine de Düsseldorf, relató de manera conmovedora los logros del proyecto, ahora casi al final de su segundo acuerdo de subvención específica. El HBP incluye a 131 instituciones de 19 países y tiene 40 proyectos asociados. Está desarrollando EBRAINS, la primera infraestructura de TIC integrada del mundo para la investigación y el desarrollo sobre el encéfalo. Para el tercer acuerdo de subvención específica, se transformará la estructura de subproyectos en una de paquetes de trabajo en aras de favorecer colaboraciones más estrechas entre neurociencia y tecnología. El HBP también ha estudiado el concepto abstracto de la conciencia tanto en seres humanos, animales y máquinas inteligentes como en organoides, cultivos de tejidos tridimensionales autoorganizados en miniatura derivados de células madre. Los organoides corticales constituyen una ventana a las enfermedades y al desarrollo del encéfalo y podrían revolucionar el estudio de las regiones del encéfalo o de su estructura en su conjunto. Con todo, junto con el estudio de la conciencia a través del empleo de organoides también surgen cuestiones éticas y preguntas relacionadas con la forma en la que se evalúa la conciencia.
Datos masivos, gran responsabilidad y grandes recompensas
Los datos masivos y la ciencia abierta son la fuerza motriz de la iniciativa HBP. Los datos masivos son necesarios, ya que resolver el enigma de la conciencia, por ejemplo, requiere una cantidad ingente de información. Natalia Manola, directora general de OpenAIRE en el Centro de Investigación e Innovación Atenea de la Universidad de Atenas, explicó el papel de la ciencia abierta. Manola manifestó que los científicos adheridos a la escuela de pensamiento de la ciencia abierta están combatiendo el coronavirus y están descifrando la genética del virus ante una situación de emergencia de salud pública mundial a una velocidad pasmosa. La sesión de la tarde terminó con el tema «Datos masivos y neurociencia computacional». La modelización computacional, al engullir cantidades de datos ingentes, ha permitido, por ejemplo, explicar la función de las dendritas, las ramificaciones de las neuronas que les permiten comunicarse entre sí. En último término, el uso de datos masivos puede ayudar a determinar qué nos hace únicos. El HBP promete arrojar luz sobre cómo la unión indisoluble de genes, factores biológicos no genéticos, experiencias individuales y acervo cultural dan forma al encéfalo. El resultado de la primera fase de investigación es, como mínimo, impresionante. Todos los investigadores en el campo de la neurobiología esperan con gran interés la próxima fase.
Países
Grecia