La educación física fortalece considerablemente la salud de los alumnos
De acuerdo con un nuevo estudio científico europeo, la participación de los niños en un programa estructurado de ejercicio físico les ayuda a mantener la forma y perder grasa corporal. Los hallazgos de este estudio, publicado en el British Medical Journal (BMJ), podrían animar a escuelas de toda Europa a poner en marcha este tipo de programas para mejorar la salud y la forma física de los jóvenes y predisponerlos a una vida adulta saludable. Bajo la dirección del Instituto de Ciencias del Ejercicio y la Salud de la Universidad de Basilea (Suiza), los investigadores estudiaron a un grupo de 540 jóvenes de 15 escuelas suizas durante un periodo de 9 meses. Su objetivo era determinar los beneficios de un programa escolar de gimnasia para la salud física y psicológica de los alumnos más jóvenes. Los alumnos de siete y once años que fueron incluidos en un grupo de intervención siguieron un programa de ejercicio físico elaborado por expertos por el cual se añadieron dos clases de educación física a las tres que ya tenían. Los jóvenes también realizaron tareas físicas en casa y breves pausas diarias para hacer ejercicio. Los alumnos del grupo de control siguieron asistiendo a las tres clases semanales habituales y no participaron en clases complementarias ni en otras actividades. Según los resultados del estudio, los niños del grupo de intervención experimentaron una mejora en la condición física aeróbica y una reducción del riesgo cardiovascular, además de perder grasa corporal y realizar una actividad física escolar más intensa. No obstante, cabe destacar que no se produjeron cambios drásticos en la actividad física diaria ni en la calidad de vida en términos generales. Desde el punto de vista educativo, el 90% de los alumnos y el 70% de los profesores acogieron las clases de buen grado y se mostraron a favor de su implantación definitiva. En opinión de los investigadores, el éxito de este programa se debió al interés despertado en alumnos y profesores, su intensidad, su integración en el currículo escolar y la participación de especialistas en educación física. La obesidad infantil y las enfermedades cardiovasculares siguen aumentando en Europa. Según los datos publicados en 2005 por el Grupo de Trabajo Internacional contra la Obesidad (IOTF), uno de cada cinco niños europeos sufre sobrepeso u obesidad. El análisis de los datos recabados mediante estudios realizados en toda Europa durante más de treinta años refleja un punto de inflexión a mediados de la década de los noventa. Los expertos del IOTF afirman que estas cifras no harán sino aumentar si no se toman medidas. El programa suizo referido ofrece a los europeos una solución práctica a este creciente problema. Los investigadores explicaron que, debido a que la población suiza se considera representativa de la del centro de Europa, los resultados se pueden extrapolar a otros países occidentales. No obstante, los investigadores de Alemania, Países Bajos y Suiza también señalaron que, a pesar del éxito que tuvo el programa durante el periodo de evaluación de un año, no existe certeza alguna respecto a la continuidad de sus efectos. En su artículo declararon que «las futuras investigaciones deberían contemplar programas de intervención plurianuales y actividades de seguimiento a largo plazo para poder establecer el contenido, la configuración y la duración idóneos de las intervenciones preventivas, así como una estimación de los costes para determinar la viabilidad de las mismas». Un editorial adjunto firmado por investigadores del Instituto de Ciencia Metabólica (Reino Unido) pone de relieve que, a pesar de las posibilidades que ofrecen los programas escolares de ejercicio físico, éstos resultan difíciles de mantener. «Algunos de los puntos fuertes del estudio son el alto grado de aplicación y de integración de la intervención en el sistema escolar, así como la gran calidad de la evaluación, elemento éste deficiente en investigaciones anteriores», explicaron. Los investigadores concluyeron que los hallazgos del estudio demostraron importantes beneficios en la actividad física y la forma física y una disminución del riesgo cardiovascular y la grasa corporal.
Países
Suiza, Alemania, Países Bajos