Subvención del CEI para investigación en las fronteras del conocimiento sobre la biodiversidad
Un nuevo proyecto comunitario se dispone a investigar durante los próximos cinco años la composición de hábitats con gran riqueza de especies, como las selvas tropicales, para conocer mejor los procesos que regulan la biodiversidad. El proyecto SPATIODIVERSITY («Hacia una teoría espacial unificada de la biodiversidad») recibirá 2,8 millones de euros durante los próximos 5 años del Consejo Europeo de Investigación (CEI) por medio del área temática «Ideas» del Séptimo Programa Marco (7PM). El CEI concede subvenciones a científicos para darles la oportunidad de realizar investigaciones creativas y de su elección en las fronteras del conocimiento. El equipo de este proyecto, coordinado por el Dr. Thorsten Wiegand y el Dr. Andreas Huth, especialistas en modelización ecológica, trabajarán en el Centro Helmholtz de Investigación sobre el Medio Ambiente (UFZ, Leipzig, Alemania) para investigar cómo y por qué coexisten distintas especies en regiones especialmente ricas en biodiversidad, como praderas, arrecifes de coral y ecosistemas de plancton. Investigar en este ámbito es indispensable para conservar la biodiversidad, que se encuentra amenazada por el cambio climático y las actividades humanas. «Para alcanzar nuestro objetivo vamos a adoptar un enfoque radicalmente distinto al de iniciativas anteriores. Adoptaremos una perspectiva espacialmente explícita que nos permitirá avanzar considerablemente hacia una teoría espacial unificada de la biodiversidad», explicó el Dr. Wiegand. El enfoque de este equipo se centrará en la distribución espacial de especies, aspecto que aún no ha sido investigado de manera exhaustiva. Dicha distribución se analizará mediante modelización informática y se someterá a los modelos más avanzados de análisis y simulación de patrones espaciales sobre zonas ricas en biodiversidad para tratar de comprender los patrones característicos de estos hábitats. Un reto específico para este proyecto será el alto grado de complejidad propio de las estructuras espaciales analizadas, lo que precisará de una capacidad ingente de análisis informático. Además, el equipo científico hará uso de un extenso corpus de datos recabados en zonas de selvas tropicales que acogen cientos de especies de árboles. «El proyecto tiene tres componentes», explicó el Dr. Wiegand. «En la primera etapa, usaremos las técnicas más modernas de análisis de patrones espaciales para cuantificar las estructuras espaciales de gran complejidad.» «A la vez», añadió el Dr. Andreas Huth, «vamos a elaborar una batería de modelos de simulación de selvas espacialmente explícitos, desde modelos "neutros" simples hasta modelos de simulación de procesos característicos de las selvas. Van a resultarnos de gran ayuda nuestros muchos años de experiencia trabajando con modelos de [simulación de] selvas como FORMIND y FORMIX3.» En la última etapa del proyecto, los investigadores aplicarán técnicas de selección de modelos para descubrir cuáles reflejan mejor las estructuras espaciales observadas en las zonas ricas en biodiversidad estudiadas. En definitiva, este proyecto servirá para comprender mejor el funcionamiento de los sistemas biodiversos, algo esencial para detener el deterioro que está sufriendo la biodiversidad y hallar maneras de conservarla.
Países
Alemania