Se inaugura una plataforma de pruebas para un sistema de manipulación remota del ITER
Se ha inaugurado oficialmente en Tampere (Finlandia) una plataforma de pruebas para un sistema de manipulación remota que será esencial para el futuro funcionamiento del reactor de fusión ITER. Estas instalaciones de pruebas de tamaño real, denominadas DTP2 (Divertor Test Platform for ITER), constituyen un gran paso adelante tanto para el proyecto internacional ITER como para la investigación sobre la fusión nuclear en general. La DTP2 ayudará al desarrollo y la puesta a prueba de un sistema de manipulación remota que se empleará para cambiar las cajas (o «casetes») del desviador («divertor»). Dichas cajas son componentes esenciales para el reactor ITER, puesto que serán las únicas que entrarán en contacto con el plasma a gran temperatura del interior del reactor con el fin de retirar las cenizas de helio. Estas cenizas son generadas por las reacciones de fusión del plasma de deuterio y tritio. De dichas reacciones surgen partículas alfa energéticas (nucleos de helio) que provocan el calentamiento del plasma, tras lo cual se convierten en cenizas de helio que deben retirarse del plasma para impedir su dilución. Cada caja del desviador pesa nueve toneladas, lo cual dificulta su manejo. Además, «las operaciones tienen que ser muy precisas, dado lo reducido del espacio», indicó el Dr. Seppo Karttunen del Centro de Investigación Técnica de Finlandia (VTT), que se ocupará de estas instalaciones en colaboración con la Universidad Tecnológica de Tampere (TUT) y la Empresa Común Fusion For Energy (F4E). Por el momento los investigadores siguen planeando la manera en que se llevarán a cabo las tareas de mantenimiento del desviador. La DTP2 servirá para comprobar la viabilidad del cierre, limpieza y transporte de las cajas. Los científicos tienen la tarea de diseñar el ciclo de mantenimiento al completo, así como las herramientas y métodos necesarios, con la ayuda de estas instalaciones de prueba y de modelos de realidad virtual. Todo este proceso servirá también para detectar los riesgos que pudiera plantear el funcionamiento del sistema. «Estas instalaciones son ideales como lugar de formación e intercambio de conocimientos, puesto que en ellas se encuentran varias tecnologías relevantes para el experimento ITER. Los conocimientos que hemos adquirido tendrán aplicaciones en distintos ámbitos innovadores», aseguró Didier Gambler, director de la Empresa Común Fusion For Energy. El diseño y la construcción de la DTP2 han necesitado de 4 años y 7 millones de euros. La mitad de estos fondos provino del programa Euratom de la UE, pero ese monto es apenas una gota en el mar comparado con los 5.000 millones de euros o más que se calcula que costará el proyecto ITER en el transcurso del próximo decenio.
Países
Finlandia