Un estudio cataloga el impacto humano sobre el cambio climático
El cambio climático antropogénico (provocado por la acción humana) está dejando una marca indeleble en los sistemas físicos y biológicos de la Tierra. Un equipo internacional de investigadores, basándose en datos que cubren un periodo de treinta años, han catalogado por primera vez en un estudio la variedad de cambios que han ocurrido en el reino animal y vegetal como resultado del cambio climático generado por los humanos. Se trata de cambios como el retroceso de los glaciares, la disminución de la población de ciertos animales, cambios en los hábitos migratorios de los pájaros y el avance en la floración de las plantas. El trabajo se ha publicado recientemente en la revista Nature. «Los humanos están modificando el clima al aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero, y el calentamiento del planeta repercute en sistemas físicos y biológicos a escala global», afirmó la autora principal del estudio, la Dra. Cynthia Rosenzweig del NASA Goddard Institute for Space Studies (Centro de Estudios Espaciales Goddard de la NASA) y del Columbia Center for Climate Systems Research (Centro de Investigación de Sistemas Climáticos de Columbia). El estudio unió a investigadores de once instituciones de todo el planeta para analizar los datos publicados sobre unos 800 sistemas físicos y casi 29.000 sistemas de plantas y animales. Su trabajo es una ampliación de la evaluación hecha por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) en 2007 que afirmaba que es muy probable que el cambio climático provocado por el ser humano tenga efectos apreciables en sistemas biológicos y físicos. El equipo construyó y analizó una base de datos a partir de las observaciones documentadas en artículos revisados inter pares (publicados en su mayoría después del tercer informe de evaluación del IPCC en 2001). Los ochenta estudios seleccionados contenían datos del periodo comprendido entre 1970 y 2004. De acuerdo con la Dra. Rosenzweig, este estudio es el primero en vincular series de datos de la temperatura global, los resultados de modelos climáticos y los cambios observados (en un amplio espectro de sistemas físicos y biológicos) para demostrar la relación entre los humanos, el clima y los impactos provocados. Los investigadores estudiaron los cambios de numerosos sistemas diferentes de todo el planeta, así como las simulaciones realizadas con un modelo de los cambios de la temperatura del clima global. «Ha sido muy complicado distinguir entre la influencia del aumento de la temperatura creado por los humanos y las variaciones naturales del clima y otros factores que pueden inducir a confusión, como los cambios en el uso del suelo o la polución», declaró el Dr. David Karoly de la Universidad de Melbourne (Australia), coautor del artículo. El Dr. Karoly elogió al equipo del proyecto por sus esfuerzos multidisciplinarios, que hicieron posible esta distinción. Sus descubrimientos han mostrado que se han producido cambios de la temperatura en todos los continentes del planeta. En los sistemas físicos, el 95% de los 829 cambios documentados, tales como el retroceso de los glaciares, son atribuibles al calentamiento. En los sistemas biológicos, el 90% de los 28.000 cambios documentados en plantas y animales responden a cambios de las temperaturas. Además, el calentamiento de los océanos, lagos y ríos afecta también a los sistemas biológicos marinos y de agua dulce y a los hábitos migratorios. El impacto de otros factores sobre estos sistemas, como el cambio en el uso del suelo, fue pequeño. El equipo concluyó que es poco probable que haya otra fuerza, aparte del cambio climático antropogénico, a la que pueda atribuirse la principal responsabilidad de las modificaciones observadas en los sistemas físicos y biológicos terrestres. Los patrones de cambio más fuertes se localizaron en América del Norte, Asia y Europa, donde se han realizado más estudios y, en consecuencia, existen más datos. En Sudamérica, Oceanía y África, la documentación es escasa y los investigadores destacan la necesidad urgente de realizar más estudios sobre sus sistemas medioambientales, especialmente en las zonas tropicales y subtropicales.