Un nuevo router proporciona una conectividad inquebrantable a vehículos policiales y ambulancias
La justificación del proyecto OpSec y Goodmill, la pyme que lo concibió, es tan simple como difícil de rebatir: por mucho que los usuarios quieran usar la app revolucionaria que cumpla sus requisitos, dicha app será tan buena como lo sea la red de telefonía móvil de la que dependa. Solo una conectividad perfecta puede cubrir estas necesidades. Esto es especialmente cierto para los profesionales de seguridad y protección públicas, como policías o personal paramédico, cuya única opción es confiar en las telecomunicaciones para garantizar su seguridad personal y la de las personas a las que prestan servicio. En este contexto, la conectividad puede ser cuestión de vida o muerte. «Cada vez hay más aplicaciones para móviles que permiten realizar operaciones más seguras y eficaces en el ámbito de la seguridad y protección públicas, y son cada vez más importantes. En Goodmill, observamos que existía una brecha de mercado y, para cerrarla, creemos que colocar un router de oficina en un vehículo y esperar que funcione no es suficiente. Nuestra solución está diseñada, concebida y optimizada para hacer frente a los retos de la conexión inalámbrica de los móviles», comenta Petteri Suomalainen, fundador y director general de Goodmill. El router de Goodmill combina redes dedicadas y comerciales con Wi-Fi y otras vías de transmisión de datos a fin de alcanzar una disponibilidad del 99,9 %. Puede instalarse en un vehículo solo con conocimientos básicos de redes. Por ejemplo, supongamos que una ambulancia se desplaza a 180 km/h durante una urgencia: el router puede utilizarse para enviar información del electrocardiograma en línea y recibir instrucciones en tiempo real del personal del hospital para administrar un tratamiento de urgencia especial al paciente. Por otra parte, un policía encontraría útil el sistema cuando pare un coche. Con Goodmill, es posible realizar una solicitud en línea a la base de datos para comprobar si alguien tiene antecedentes penales o permiso de armas consultando el número de matrícula. El router incluye prestaciones innovadoras. Una de la más importantes es el encapsulamiento de Mobile IP, que garantiza una transición suave entre redes. «Mobile IP aísla totalmente las capas más altas (aplicaciones y servicios) a partir de los “detalles desordenados” de las redes de radio subyacentes. Además, nuestros algoritmos de valoración de la calidad y de selección de enlaces pueden funcionar en paralelo con Mobile IP a fin de garantizar que se usa el enlace más adecuado en todo momento. Recientemente, incluso hemos optimizado las capacidades de enlace múltiple y, al mismo tiempo, hemos abordado los retos de la priorización de aplicaciones. Así, nos aseguramos de que los datos más importantes siempre se entregan», explica el señor Suomalainen. La empresa espera conseguir una cuota de mercado del 20 % en 2020 y ya ha vendido equipos para implantarlos nacionalmente en Finlandia, Noruega, Islandia, Kuwait y Qatar, donde ya se usan miles de routers Goodmill. Con OpSec, el señor Suomalainen y su equipo se centraron en mejorar la tecnología para reflejar el reciente aumento de la necesidad de capacidades de datos y la necesidad de unas prestaciones de seguridad más modernas. Asimismo, se centraron en desarrollar prestaciones específicas para los EE. UU. que cubriesen las necesidades de ese mercado. «Nuestro segmento de mercado es fiel y global, pero utiliza procesos conservadores. En ocasiones, la toma de decisiones sobre seguridad pública es muy burocrática y es imposible convertir esta decisión en crítica, a pesar de que exista una necesidad urgente de las prestaciones que ofrecemos. Con esta financiación, pudimos orientarnos a mercados totalmente nuevos y prometedores en los que no hubiésemos podido entrar de otro modo, como México, Canadá y los EE. UU.», concluye el señor Suomalainen.
Palabras clave
OpSec, router, ambulancia, policía, red de telefonía móvil, cobertura, Goodmill, disponibilidad