Diagnósticos de septicemia más rápidos para salvar vidas y ahorrar costes
Este logro podría, además de salvar vidas, reducir considerablemente los costes sanitarios. Supone también una oportunidad para que pymes europeas dedicadas a la alta tecnología exploten un mercado enorme con una innovación beneficiosa desde muchos puntos de vista. El trabajo, incluido en el proyecto financiado con fondos europeos CE-MICROARRAY, reducirá la cantidad de tiempo que se precisa para diagnosticar pacientes en riesgo de desarrollar septicemia, una de las principales causas de mortalidad en pacientes hospitalizados. La septicemia es una enfermedad mortal provocada por una reacción excesiva del organismo ante una infección. Puede iniciarse directamente a causa de una infección tras un tratamiento o cirugía. Se calcula que en todo el mundo se producen diariamente cerca de veinte mil defunciones por septicemia. En Europa se produce por esta causa alrededor de medio millón de muertes anuales cada año. Un diagnóstico temprano es fundamental para reducir considerablemente estas tasas de mortalidad, pero los métodos diagnósticos disponibles precisan de hasta setenta y dos horas. La innovación ofrecida por el proyecto CE-MICROARRAY podría cambiar esta situación. El equipo del proyecto fue el primero en emplear para tal fin la «espectroscopia de absorción mejorada por cavidades» (cavity enhanced absorption spectroscopy), un método de análisis que ofrece diagnósticos más sensibles, fiables y rápidos del riesgo de desarrollar septicemia. La técnica mejora la sensibilidad de los análisis de sangre disponibles hasta ahora, los cuales se basan en atravesar varias veces la muestra con luz. El equipo confía de este modo en generar análisis hasta cien veces más sensibles que los tradicionales. Esta innovación podría ahorrar miles de millones de euros a los servicios sanitarios de todo el mundo. De hecho, el potencial de mercado es tal, que el proyecto calculó una cifra superior a los 1 000 millones de euros y un beneficio acumulado de unos 38 millones de euros durante cinco años para las pymes que forman el consorcio. Una de las pymes asociadas al proyecto, por ejemplo, es una empresa especializada en sistemas analíticos innovadores creada al amparo de la investigación de CE-MICROARRAY. Los socios del proyecto trabajan ya en la producción de instrumentos prototipo demostradores que aceleren la comercialización de los resultados. CE-MICROARRAY también estudió las características de posibles biomarcadores que pudiesen emplearse en el diagnóstico del riesgo de septicemia, otro de los elementos fundamentales del proyecto. Ya se han identificado varios biomarcadores útiles que servirán para sentar las bases de la nueva generación de pruebas analíticas de la septicemia. El consorcio del proyecto cuenta con pymes experimentadas de toda Europa, muchas de las cuales conocían las oportunidades comerciales y sanitarias que ofrece esta técnica pero no contaban con la capacidad para poner en marcha la I+D necesaria con la que generar prototipos funcionales. La financiación de la UE resultó crucial en este sentido. CE-MICROARRAY finalizará en abril de 2016. Para más información, consulte: el sitio web del proyecto CEMICROARRAY
Países
Reino Unido