El futuro de la construcción naval europea pasa por las uniones adhesivas
En la construcción naval se pueden lograr reducciones considerables del peso de las embarcaciones si se emplean materiales ligeros. De esta forma se reduce el consumo de combustible y se generan beneficios económicos y medioambientales. No obstante, la fiabilidad de los modelos ligeros ha sido puesta en entredicho, y en concreto la fiabilidad de las juntas de los distintos componentes utilizados. Con el fin de apoyar a la industria naviera europea, el programa GROWTH financió una investigación exhaustiva sobre las posibilidades que ofrecen las uniones adhesivas. En BONDSHIP participaron ingenieros de la Universidad de Southampton (Reino Unido), quienes se centraron en la modelización numérica. Se identificaron puntos flacos mediante un modelo de superestructuras que calculó los niveles de carga ante las peores situaciones a las que se podría enfrentar un buque. En lo que respecta a la modelización de la respuesta del propio adhesivo, la opción multilineal del programa de modelización de elementos finitos ANSYS deparó el mayor grado de coincidencia entre los resultados modelados y los experimentales. Los ingenieros de la Universidad de Southampton encargados del proyecto también evaluaron una serie de métodos para anticipar los niveles de tensión registrados en el interior del adhesivo. Descubrieron que las técnicas de elementos finitos eran más precisas que las analíticas, aunque más complicadas. Por último, se estudió al detalle el comportamiento de estructuras en las que se habían formado grietas. Por ejemplo, las relaciones entre carga y tamaño de grieta se examinaron en el laboratorio y mediante simulaciones. Los resultados preliminares indican que la energía necesaria para provocar una fractura era en realidad mayor que la que indicaban los resultados del modelo, aunque se recomendó realizar más experimentos.