Un control más fácil de la incontinencia
Controlar la orina puede ser muy problemático para las personas que sufren problemas graves de incontinencia, sobre todo si han perdido parte de su movilidad, y de manera especial en el caso de las mujeres. El uso de orinales femeninos está poco extendido porque sólo son efectivos si la usuaria se encuentra de pie o sentada en el borde de una silla. Además, la capacidad de los orinales femeninos convencionales debe ser grande y, debido a su tamaño, resulta incómodo aplicarlos y retirarlos. Para resolver esta situación, el proyecto NICMS desarrolló un orinal estrecho. El dispositivo no precisa una gran capacidad, puesto que la orina es retirada de forma inmediata hasta un «sistema de recogida de líquidos» donde se almacena hasta su retirada. Gracias a su reducido tamaño, no es necesario que la usuaria se desvista para colocar la boca del urinal en su sitio, por lo que para las mujeres es mucho más cómodo de usar que los orinales comunes. El dispositivo emplea un «filtro de elevado punto de burbuja» para eliminar el aire del líquido que fluye hacia el contenedor de almacenamiento. Fue necesario añadir más filtros de partículas para prolongar la vida útil del material de elevado punto de burbuja. Para una mayor higiene del filtro se añadió un material reductor de humedades y olores en el centro del mismo. La unidad es desechable y el filtro se cambia cada 24 horas.