Un aislamiento sostenible que se puede reciclar y reutilizar
Un edificio es tan eficiente como lo es su envoltura. Por desgracia, en muchos edificios, esa envolvente no es muy eficiente. De hecho, el parque inmobiliario europeo es responsable del 40 % del consumo final de energía de la Unión Europea, lo que lo convierte en el mayor consumidor de energía del continente. La buena noticia es que estos edificios se pueden renovar y hacer más eficientes desde el punto de vista energético. La mala noticia es que el aislamiento utilizado para ello no es muy sostenible. «La mayoría de los materiales empleados para aislar edificios están derivados del petróleo, lo cual significa que tienen una huella de carbono bastante considerable y una capacidad limitada para ser reciclados o reutilizados», explica Eddie Koenders, investigador de la Universidad Técnica de Darmstadt. Pero esto podría cambiar pronto gracias a un innovador aislamiento de espuma que se está desarrollando en el marco del proyecto financiado con fondos europeos NRG-STORAGE. «Nuestro objetivo era desarrollar un material aislante prefabricado y sostenible que fuera ligero, fácil de instalar y que, en definitiva, hiciera los edificios no residenciales más eficientes energéticamente», añade Koenders, que coordinó el proyecto.
Una espuma cementosa sostenible y ultraligera
El resultado de esta labor es una espuma cementosa ultraligera que puede aplicarse al exterior de un edificio. «Lo que hace que este material sea único es que permite almacenar energía térmica en el aislamiento aplicado a la superficie exterior de un edificio», explica Koenders. No solo estabiliza la temperatura en el interior del edificio, sino que además reduce la demanda de energía. «Otra ventaja importante es que nuestro aislamiento de espuma permite reducir el grosor del aislamiento en un 60 %, lo cual significa que se pueden aislar más edificios con menos materia prima», recalca Koenders.
La colaboración es fundamental
El proyecto es el resultado de una estrecha colaboración entre el sector industrial y la comunidad científica e investigadora, un trabajo conjunto que ha sido clave para el éxito de la iniciativa. «Esta colaboración nos permitió alcanzar todos los objetivos de investigación y desarrollo del proyecto, desde encontrar la mezcla adecuada para la espuma ultraligera hasta adaptarla a la producción industrial», observa Koenders. Con la mezcla adecuada en la mano, el equipo del proyecto fabricó sus paneles aislantes de espuma en Alemania que, a continuación, se instalaron en edificios de demostración en Bulgaria. Los investigadores miden ahora el rendimiento energético de los edificios para determinar cómo se comporta la solución de NRG-STORAGE en comparación con los materiales aislantes convencionales. «Los resultados preliminares son muy prometedores», comenta Koenders. En el proyecto también se están llevando a cabo demostraciones en una de las instalaciones de su empresa asociada en España.
Eficiente, reciclable y reutilizable
Aunque aún queda trabajo por hacer, Koenders cree que el aislamiento de espuma del proyecto constituirá toda una revolución, ya que hará más eficientes los edificios europeos y favorecerá una economía circular. «El legado de nuestra investigación es un concepto muy innovador de un material aislante sostenible eficiente desde el punto de vista energético y totalmente reciclable y reutilizable», concluye Koenders. Los socios del proyecto siguen colaborando y, en la actualidad, trabajan para escalar la producción de los paneles aislantes y comercializarlos.
Palabras clave
NRG-STORAGE, sostenible, material aislante, eficiencia energética, material de construcción, reciclable, reutilizable, economía circular, espuma cementosa