Una mejor evaluación de las necesidades de los pacientes de mayor edad para un tratamiento oncológico más adecuado
¿Cómo podemos cuidar de forma eficaz a un grupo de la población cada vez más numerosos que envejece rápidamente? Debido al aumento del número de personas pertenecientes a dicho segmento, es necesario que la asistencia sanitaria responda mejor a los nuevos y grandes desafíos sanitarios. Entre ellos, una gestión adecuada de las enfermedades concomitantes en los pacientes de edad avanzada. Los modelos de asistencia actuales están resultando ser lentos, costosos e inadecuados para la complejidad del tratamiento de pacientes afectados por múltiples enfermedades crónicas. Para abordar estas cuestiones, el proyecto financiado con fondos europeos GERONTE se propone mejorar, a la par que simplificar, de forma innovadora el proceso de atención a pacientes que sufren cáncer y otras enfermedades. Los resultados de un estudio del proyecto sobre la evaluación de las necesidades de los pacientes oncológicos de edad avanzada se han publicado en «Journal of Geriatric Oncology». Tras una revisión sistemática de los datos relevantes, los autores llegaron a la conclusión de que una evaluación más intensiva y exhaustiva puede mejorar los planes de tratamiento, así como conducir a medidas que mejoren la comunicación sobre la planificación de la asistencia. El tratamiento oncológico plantea riesgos adicionales y efectos secundarios potencialmente graves para los pacientes de mayor edad. «Teniendo en cuenta que la heterogeneidad de los pacientes mayores, aunque tengan la misma edad, resulta importante determinar el grado de fragilidad, o la forma en que se encuentran, antes de comenzar el tratamiento oncológico», explica la coautora del estudio, la doctora Siri Rostoft, del Hospital Universitario de Oslo (Noruega), en un artículo publicado en el sitio web de la universidad.
Un tratamiento oncológico centrado en el paciente
El estudio también examinó el impacto de diferentes tipos de evaluación y destacó la importancia de identificar cualquier deterioro cognitivo. «Una evaluación geriátrica condujo a un mayor debate sobre los objetivos de la asistencia y una mejor comunicación», señalan los autores en el estudio. Esto contribuye a que el plan de tratamiento cubra el nivel individual de función emocional y cognitiva, y su red de apoyo social. También deberían valorarse otras cuestiones. «Principalmente, ¿quieren evitar los efectos secundarios o aliviar los síntomas del tumor? ¿Buscan un tratamiento que les prolongue la vida a cualquier precio o le dan más importancia a valerse bien en su vida cotidiana?», comenta Rostoft. Tal como concluyen los autores en el estudio, «la evaluación geriátrica puede reducir las complicaciones y la toxicidad, mejorar las probabilidades de completar el tratamiento, y conducir a una mayor funcionalidad cotidiana y calidad de vida». El objetivo a largo plazo de GERONTE (Streamlined Geriatric and Oncological evaluation based on IC Technology for holistic patient-oriented healthcare management for older multimorbid patients) es mejorar la calidad de vida de los pacientes multimórbidos, al tiempo que reduce el coste de la asistencia y perfecciona los procesos de toma de decisiones. El proyecto, con una duración de 5 años, concluirá en 2026. Para más información, consulte: Sitio web del proyecto GERONTE
Palabras clave
GERONTE, personas de mayor edad, cáncer, asistencia sanitaria, evaluación geriátrica, pacientes multimórbidos