Sin cables: la nueva forma de cargar los vehículos eléctricos
El futuro puede ser eléctrico, pero corre el riesgo de enredarse con los cables eléctricos. Los vehículos eléctricos (VE) suelen cargarse mediante una conexión a una estación de carga. Este método funciona bien para el número limitado de VE que circulan actualmente, pero a medida que aumente la distancia que pueden recorrer, aumentarán también las necesidades de carga autónoma. Para Easelink, empresa austriaca de alta tecnología, el cambio consiste en decir adiós a los cables y automatizar el sistema. Con el apoyo de los fondos europeos, la empresa ha desarrollado Matrix Charging, tecnología de carga conductiva automatizada para VE. «Atender la demanda del creciente número de vehículos eléctricos exige que nos replanteemos nuestra infraestructura de carga», afirma Hermann Stockinger, fundador y director general de Easelink. «Matrix Charging responde a esta llamada, ya que habilita una red de carga automatizada que abarca toda una zona, facilita el uso de la energía renovable y respalda la conducción autónoma».
Carga inalámbrica
El sistema Matrix Charging consta de dos componentes principales: un conector que se fija a los bajos del vehículo y una plataforma que se incrusta en la plaza de aparcamiento. «Cuando un VE equipado con el sistema aparca sobre la plataforma, el conector desciende hasta ella e inicia la conexión conductiva», explica Stockinger. Según Stockinger, este sistema no solo atiende la necesidad de una forma de carga cómoda y automatizada, sino que también permite aumentar el tiempo de conexión del VE a la red, lo que a su vez contribuye a controlar la demanda energética. «La tecnología puede integrarse en el suelo del aparcamiento, de modo que se eliminan las columnas de carga y los cables», añade. «Nuestro sistema también ofrece a las ciudades la posibilidad de tender una red de carga sobre la infraestructura ya existente». Con el respaldo de la Unión Europea, la empresa pudo desarrollar su tecnología Matrix Charging desde el prototipo hasta la preparación para su comercialización. Para ello, la empresa llevó a cabo un amplio programa piloto con diversos casos de uso, que incluyeron flotas empresariales y servicios de coches multiusuario. «Al cooperar con representantes de los principales proveedores y fabricantes de automóviles, operadores de redes y flotas, y planificadores urbanos, pudimos abordar satisfactoriamente los requisitos de los vehículos y la infraestructura necesarios para desplegar redes de carga automatizada», señala Stockinger. De cara a la comercialización, la empresa también ha tomado medidas para adaptar Matrix Charging a las normas internacionales de carga autónoma, incluidas las de la Comisión Electrotécnica Internacional (CEI) y la Organización Internacional de Normalización (ISO). «Los dispositivos de carga automática para vehículos de pasajeros son una tecnología vanguardista que aún no está lo suficientemente contemplada en las normas existentes», afirma Stockinger. «Nuestra participación en estas organizaciones nos permite desempeñar un papel destacado en el desarrollo de normas para la carga conductiva automatizada».
La revolución de la carga inteligente
Como resultado del proyecto, Easelink ha posicionado firmemente su tecnología Matrix Charging en los lucrativos sectores de la automoción y las infraestructuras. «Matrix Charging es más que una solución práctica, es la base de una red revolucionaria de carga inteligente, que puede integrarse fácilmente en las infraestructuras existentes y facilita el uso de energías renovables», concluye Stockinger. Easelink trabaja actualmente con los principales proveedores y fabricantes de automóviles para ejecutar el desarrollo en serie de Matrix Charging. Además, el equipo continúa efectuando pruebas piloto y demostraciones en diferentes entornos operativos de todo el mundo.
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