Un método innovador con polvo de carburo de silicio produce un rociado térmico más fuerte y ecológico
El carburo de silicio (SiC) es extremadamente fuerte, tiene un bajo coeficiente de fricción y un valor mínimo de densidad, con lo que se trata de una opción muy atractiva para muchas aplicaciones en la industria química y petroquímica. Sin embargo, el SiC se convierte en gas cuando se calienta, así que es imposible aplicarlo en forma de rociado térmico. Imposible hasta ahora. El proyecto financiado con fondos europeos ThermaSiC está a punto de revolucionar este sector, ya que ha desarrollado el primer recubrimiento de SiC por rociado térmico. «El material innovador que empleamos para el recubrimiento es resistente al desgaste y está basado en carburo de silicio, un elemento famoso por su resistencia a todo tipo de desgaste y corrosión, así como a altas temperaturas», explica Gisle Østereng, coordinador del proyecto. «ThemaSiC también es un material más ecológico que sus competidores, como el carburo de tungsteno, el cobalto o el cromo, y se puede obtener en zonas donde no hay conflictos». Un producto superior en forma de polvo Seram Coatings, el principal socio del proyecto, ya lleva tiempo produciendo SiC en polvo. Este producto innovador contiene una capa de óxido alrededor de cada partícula de SiC, lo que le ofrece protección durante el rociado y le permite formar el recubrimiento. En el proyecto, el trabajo de Seram consistió en demostrar la eficacia de ThermaSiC, un nuevo producto en polvo para el recubrimiento con rociado térmico que aporta una mayor resistencia al desgaste, un peso reducido, un menor nivel de emisiones y una mayor vida útil para las piezas en las que se aplica. Østereng comenta: «El rociado térmico es el método más eficaz y buscado para los recubrimientos antidesgaste a nivel industrial. ThermaSiC se puede emplear con pistolas de rociado térmico y formar un recubrimiento con un coste menor que el de los métodos tradicionales con cámaras de vacío, como la CVD o la PVD». Otro esfuerzo del proyecto consistió en ampliar la capacidad de producción de Seram y finalizar su estrategia de ventas, «marketing» y propiedad intelectual. Algunos de los principales logros del proyecto fueron la ampliación eficaz de la producción —con el traslado de la fabricación a la zona industrial más importante de Noruega—, una caracterización positiva del polvo y los recubrimientos y la finalización de un estudio sobre el mercado y la cadena de valor. Se realizaron diferentes pruebas internas, así como con socios del sector de los rociadores y otras entidades independientes, para mejorar aún más la preparación de la tecnología ThermaSiC. En marzo de 2018 se realizaron los primeros recubrimientos de gran densidad con el sistema de rociado térmico TopGun HVOF. Con todo, debido a algunos problemas inesperados con otros socios del proyecto, los investigadores no pudieron demostrar la viabilidad de ThermaSiC como producto independiente, sino como parte de una combinación de materiales. «Ahora estamos comercializando las aplicaciones con estas combinaciones y trabajando para demostrar que el producto puede ser una solución independiente en otros campos», explica Østereng. En el umbral de una revolución A pesar de este retraso, Østereng está convencido de que ThermaSiC está a punto de revolucionar el mercado de los materiales para el rociado térmico con una solución más fuerte, rentable y sostenible. «ThermaSiC aporta un recubrimiento superior en entornos corrosivos y abrasivos, así como a una temperatura ambiente de hasta 1 500 °C. Puesto que el SiC es uno de los materiales sintéticos más resistentes del mundo y tiene una densidad menor que la de otras opciones de recubrimiento, ThermaSiC aporta una mayor vida útil, un menor coste de mantenimiento y una ventaja competitiva y sostenible a las aplicaciones en las que se utiliza», concluye.
Palabras clave
ThermaSiC, carburo de silicio, SiC, rociado térmico, recubrimiento, Seram Coatings