Las plantas absorben más carbono bajo cielos contaminados, según un estudio
Una nueva investigación llevada a cabo en Suiza y el Reino Unido revela que, aunque parezca paradójico, las plantas absorben más dióxido de carbono (CO2) cuando la atmósfera está contaminada que cuando está limpia. En un artículo publicado en la revista Nature, los científicos advierten que si los niveles de contaminación atmosférica continúan disminuyendo, será necesario reducir aún más drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero para estabilizar el clima. Las plantas dependen del sol para absorber CO2 de la atmósfera. Aunque parece todo menos lógico, las plantas, en realidad, absorben CO2 de forma más eficaz bajo una luz solar brumosa que bajo una luz fuerte y directa. Cuando las plantas están expuestas a la luz solar directa, las hojas de la parte superior de la cubierta vegetal reciben más luz solar de la que necesitan, mientras que las hojas que permanecen a la sombra no reciben la suficiente. Sin embargo, cuando las nubes y las partículas diminutas de sustancias contaminantes dispersan la luz, las hojas de la parte inferior de la cubierta vegetal reciben relativamente más luz que cuando están expuestas a una luz fuerte. Así pues, las plantas absorben CO2 de forma más efectiva bajo la luz difuminada que bajo la luz directa. Entre 1950 y 1980 el mundo sufrió un proceso de «oscurecimiento global», ya que los patrones de nubes cambiaron y los grandes niveles de contaminación provocaron una disminución de la luz solar que llegaba a la superficie terrestre. Sin embargo, desde la década de los ochenta, los cielos que cubren muchas zonas industrializadas del mundo han recuperado bastante luminosidad gracias a la reducción de las emisiones de contaminantes como el dióxido de azufre. En este estudio, los científicos investigaron qué impacto tenían estos cambios en la cantidad de carbono que las plantas absorbían y almacenaban. «Sorprendentemente, los efectos de la contaminación atmosférica parecen haber mejorado la productividad de las plantas del planeta en más de una cuarta parte desde 1960 hasta 1999», explicó la Dra. Lina Mercado, del Centro de Ecología e Hidrología (Reino Unido) y autora principal del estudio. «El resultado fue un aumento global del 10 % en la cantidad de carbono almacenado por la tierra tras tenerse en cuenta otros efectos.» Esto lleva a preguntarse por lo que sucederá en el futuro si, tal y como se espera, la contaminación atmosférica continúa disminuyendo. Los científicos concluyen que «será necesaria una reducción aún más drástica de las emisiones de combustibles fósiles para estabilizar el clima si, tal y como se espera, disminuyen los aerosoles antropogénicos». «A medida que purificamos el aire de la capa inferior de la atmósfera, algo que debe hacerse por el bien de la salud humana, se agrava también el desafío de evitar el peligroso cambio climático mediante las reducciones de las emisiones de CO2», informó el profesor Peter Cox de la Universidad de Exeter (Reino Unido). «Los diferentes contaminantes que provocan el cambio climático tienen efectos directos en las plantas muy distintos entre sí, los cuales se deben tener en cuenta para tomar decisiones correctas sobre cómo afrontar el cambio climático.»
Países
Suiza, Reino Unido