Una nueva cometa generadora de electricidad puede revolucionar la energía eólica
La tecnología de turbinas eólicas ha avanzado de manera significativa, pero todavía no aprovecha los vientos de alta energía que se encuentran en los cielos. El aprovechamiento de estos vientos de elevada altitud podría ayudar a satisfacer las grandes necesidades energéticas del planeta y a reducir el coste de la generación de energía. El proyecto financiado con fondos europeos NEXTWIND (Harvesting airborne wind energy using rigid kites) ha puesto en marcha una tecnología que promete revolucionar la energía eólica. Esta nueva turbina eólica de tipo cometa produce energía renovable de una forma segura, asequible y respetuosa con el medio ambiente. El siguiente paso era trazar un plan para atraer a nuevos inversores y poder comercializar lo antes posible esta solución ecológica. Llevar la energía eólica a nuevas cotas A altitudes elevadas, el viento es mucho más fuerte y sopla de forma más constante en comparación con la parte alta de un gran molino de viento tradicional. Los socios del proyecto demostraron con éxito el funcionamiento autónomo de una turbina de cometa de 30 kW en un entorno operativo de su zona de pruebas. Esta cometa asciende cientos de metros, incluso hasta un kilómetro, donde puede recoger fácilmente las grandes cantidades de energía disponibles a esa altitud. Con una producción a escala completa podrían alcanzarse los 1 500 metros de altitud. Cómo está cambiando la tecnología eólica la cometa de NEXTWIND El nuevo tipo de turbina eólica voladora de Kitemill puede hacer accesible y más asequible la energía eólica para diversas ubicaciones remotas. Al contrario de lo que sucede con las turbinas eólicas actuales, la cometa de Kitemill no requiere grandes diseños sino estructuras ligeras. Este sistema de cometas ofrece tres ventajas principales que hacen que su diseño resulte mejor que las turbinas eólicas convencionales: alcanza mayores altitudes, utiliza menos material y es más eficaz aerodinámicamente. El sistema consiste en la propia cometa, una estación base, un sistema de control y un sistema de despegue y aterrizaje en vertical. La integración de este último sistema es lo que hace único el diseño de Kitemill. La cometa genera una fuerza de sustentación aerodinámica que se transmite mediante fuerzas tensiles de la cuerda. La cuerda se conecta a un tambor que está acoplado a un generador terrestre, donde se produce la energía. Por último, un sistema de control pilota la cometa a lo largo de una trayectoria predefinida de vuelo helicoidal. Para todo el conjunto de esta turbina de cometa solamente se requiere el 10 % de la masa de una turbina eólica convencional. Además, esta solución puede ofrecer hasta el doble de horas operativas gracias a su uso a altitudes elevadas. Una alternativa al diésel que resulta ecológica y rentable La cometa de NEXTWIND está dando un salto más allá de lo que pueden ofrecer las turbinas eólicas tradicionales. Se puede producir energía con un factor de retención superior al 50 %, lo cual resulta un dato impresionante. Más importante si cabe es el coste normalizado de la energía, un parámetro fundamental para establecer el coste total de la generación de energía. Dado el constante endurecimiento de la legislación sobre emisiones de carbono, las instalaciones de generación de energías renovables, incluidas las alternativas sin conexión a la red, se están desarrollando a buen ritmo. La tecnología avanzada de turbina eólica aérea de la empresa Kitemill puede sustituir al diésel en sistemas sin conexión a la red o en redes deficitarias. El coordinador del proyecto Thomas Hårklau señala: «la comparación entre el diésel, la energía eólica convencional y las turbinas de cometa muestra que estas últimas pueden reducir el coste normalizado de la energía hasta en un 60 % pese a estar penalizado por su falta de madurez y la necesidad de una mayor inversión de capital». Además, mientras que las turbinas eólicas tradicionales requieren hasta diez grandes camiones para reubicarlas y necesitan ser desmanteladas, las turbinas de cometa pueden reubicarse fácilmente y no representan un estorbo permanente en el paisaje. Esto reduce el riesgo de retención de activos y aumenta la capacidad para financiar proyectos asociados. La visión de Kitemill es desempeñar un papel importante en el camino hacia una sociedad sin emisiones de gases de efecto invernadero. «La energía utilizada para construir esta turbina eólica de cometa queda claramente superada por la energía generada durante su explotación», explica el coordinador del proyecto Thomas Hårklau. La conferencia sobre energía eólica aérea celebrada en Friburgo en 2017 representó una importante ocasión para que el sector se reuniese e intercambiase información sobre el potencial de estos sistemas de generación de energía. En este contexto, los socios del proyecto también estudiaron los retos que siguen existiendo para la comercialización de esta tecnología de energía emergente con el objetivo de convertirla en una opción atractiva para aplicaciones a pequeña escala.
Palabras clave
NEXTWIND, electricidad, Kitemill, energía eólica, turbina eólica aérea, vientos de altitud elevada
