Una reconexión racional de los ríos europeos
Los ecosistemas fluviales son de los más amenazados. De ellos se obtiene energía eléctrica, alimentos y agua potable. En 2015 solo la mitad de las aguas superficiales de Europa habían alcanzado el objetivo de «buen estado ecológico» tal y como se define en la Directiva Marco del Agua de la UE. El proyecto financiado con fondos europeos AMBER presentó los resultados de su estudio de casos sobre la gestión de las presas de la Cuenca del Nalón-Narcea en Asturias (España) y sus hallazgos ofrecen información interesante sobre los elementos naturales y sociales que influyen en una gestión fluvial sostenible. Un método bimembre Los investigadores de AMBER, de la Universidad de Oviedo, trabajaron con grupos de interés locales y ayuntamientos para hacerlos partícipes del estudio. La participación pública y el conocimiento de las prioridades locales por parte de los investigadores y un conocimiento de los residentes sobre el objetivo de la investigación son factores clave para la gestión adecuada de los recursos. Para lograr estos objetivos, se formuló y validó un cuestionario que ya se está distribuyendo y que servirá para conocer la opinión de los residentes del Alto Nalón en relación a las reservas naturales. Para analizar la biodiversidad del ecosistema de forma no invasiva, los investigadores utilizaron herramientas moleculares propias con las que crear una colección exhaustiva y así evitar molestar a la fauna mediante pesca eléctrica. Se extrajo además ADN medioambiental de muestras de agua para generar una idea más clara de la biodiversidad local y detectar macroinvertebrados, peces y aves. El equipo confía en detectar además trazas de mamíferos. El proyecto publicó recientemente un artículo sobre la identificación de salmónidos en el ADN medioambiental a partir de muestras de agua obtenidas del río Nora y otros emplazamientos de Asturias. En sus propias palabras: «Nuestras herramientas nos permiten conocer rápidamente el estado de la comunidad de salmónidos sin emplear sistemas de PCR en tiempo real y, en el caso concreto de España, permitió detectar salmónidos exóticos y endémicos al mismo tiempo. En su estado actual, el método puede utilizarse en aguas de España, pero podría adaptarse fácilmente para su empleo en otras regiones comprobando la amplificación cruzada con la fauna acuática local». Los embalses, ecosistemas bajo lupa La zona a estudio incluye los embalses de Tanes y Rioseco, los cuales se emplean en la producción de electricidad. El agua se bombea desde Rioseco a Tanes por la noche y a la inversa durante el día para producir energía. La zona más alta está ubicada en una Reserva de la Biosfera de la UNESCO y pertenece al Parque Natural de Redes. El ecosistema es principalmente boscoso y los dos embalses tienen una numerosa población de anfibios. El último eslabón de la cadena trófica del ecosistema reside en un grupo muy variado de invertebrados acuáticos, mientras que el primero son las nutrias y el segundo dos salmónidos autóctonos, la trucha (Salmo trutta) y el salmón del Atlántico (Salmo salar). No obstante, el salmón del Atlántico no llega a las zonas de cabecera debido a las presas insalvables, lo que implica que en las zonas a estudio solo se encuentra la trucha. Las presas son por naturaleza ecosistemas artificiales, de modo que no suelen gozar de protección medioambiental y se pueden liberar especies exóticas. En los casos a estudio, el equipo descubrió que la trucha arco iris (Oncorhynchus mykiss) y el piscardo (Phoxinus phoxinus) se introdujeron para la pesca recreativa y como cebo de pesca, respectivamente. Este estudio contribuye al objetivo fundamental de AMBER (Adaptive Management of Barriers in European Rivers), esto es, abordar el complejo reto de la fragmentación fluvial. Las herramientas desarrolladas por el proyecto pueden utilizarse también para evaluar la opinión pública sobre la gestión de las reservas de agua, las presas y los recursos y, cuando sea necesario, identificar especies de forma no invasiva. El procedimiento de ADN medioambiental podría resultar útil para detectar salmónidos en emplazamientos donde estos son exóticos y suponen un peligro para la fauna local o filtraciones de piscifactorías, un problema grave para las poblaciones en libertad. Para más información, consulte: Sitio web del proyecto
Países
Reino Unido